De acuerdo con El Universal, el secretario general del PRD, Alejandro Sánchez Camacho, declaró que los legisladores de su partido votarán en unidad en contra de la reforma que privatiza Pemex, pero en caso de que algún legislador perredista vote a favor habrá sanciones, por lo cual advirtió a sus legisladores a no tener "esos malos pensamientos, esa tentación de votar a favor de la reforma energética".
Pero si a pesar de ello lo hacen, "entonces no sólo para que políticamente se de una lectura efectivamente de traidores al pueblo de México, sino también se dan las condiciones para que el partido pueda actuar en términos legales de (sic) sancionar a esos legisladores".
La sanción, previo proceso, podría implicar la suspensión de sus derechos como militantes, lo cual equivale a la expulsión.
Esto debido a que votar por la reforma ebergética "sería no solo un acto de desobediencia a las instancias del partido, sino un acto de traición al pueblo de México", dijo Sánchez Camacho.
Los legisladores perredistas dividieron su voto con la reforma fiscal, con los de la corriente Nueva Izquierda votando principalmente a favor.
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