De acuerdo con Reforma, los programas en cuestión carecen de mecanismos de rendición de cuenta, denunciaron organizaciones independientes de análisis de finanzs públicas.
Esto significa que la opacidad y el ejercicio discrecional continuará imperando el gobierno de Enrique Peña Nieto, denunciaron.
Esto significa que no hay incentivos para que el gobierno realice presupuestos realistas, ya que los pueden modificar durante el año.
Quiere decir además que mientras algunos ramos gastan más de lo que se les asigna de presupuesto, y lo tienen que tomar de otra parte, en otros hay subejercicios y el remanente se usa de manera discrecional.
De hecho, 44 programas sociales del gobierno de Peña Nieto tienen problemas de opacidad que no informan a qué población benefician o el cumplimiento de sus metas.
Además, 33 programas, que incluyen Escuelas de Calidad y Apoyo al Empleo, no están en condiciones de resolver la problemática para la que fueron diseñados debido a su bajo nivel de covertura.
Las dos secretarías con mayor opacidad son la SAGARPA y la SEDATU, ambas de atención al campo.
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