La encuesta miestra que la cantidad de personas en contra del capital privado en Pemex aumentaron 10% entre febrero y agosto de 2013, mientras que los que sí quieren inversión privada en Pemex cayeron de 21% en febrero a 20% en agosto.
La encuesta revela además los siguientes datos:
40% considera que lo más importante a incluir en una reforma energética es reinvertir las ganancias de Pemex para que produzca más. Sólo 5% considera que lo más importante es incluir inversión privada. 26% considera que se debe reducir la influencia del sindicato de Pemex y 21% que la burocracia gaste menos recursos.
50% (la mayoría) considera que Pemex tiene la tecnología para sacar petróleo de lugares profundos y de difícil acceso. 41% cree que no la tiene. El resto no sabe o no contestó.
38% (la mayoría) considera que Pemex está entre las empresas más modernas del mundo. Sólo 24% cree Pemex no está entre las más modernas. Y 29% considera que ni está entre las más modernas ni está entre las menos modernas.
Finalmente, la mayoría de los mexicanos, equivalentes al 51%, considera que de cambiarse las leyes en materia energética la gasolina y el gas aumentarían de precio; 50% creen que subiría la luz. Sólo 29% cree que bajaría el precio de la gasolina; 28% cree que bajaría el precio del gas, y 27% cree que bajaría la luz.Esto quiere decir que la mayoría de los mexicanos no se han tragado la propaganda del PRI que dice que con la privatización de Pemex bajaría la gasolina y la luz.
Con esta ya son 4 encuestas distintas las que muestran que la mayoría de los mexicanos rechazan la privatización en Pemex.
De acuerdo con la metodología de la encuesta, ésta fue levantada entre electores mayores de 18 años en viviendas del 8 al 13 de agosto. Es decir, incluyó dos días de propaganda del gobierno federal priista a favor de la privatización de Pemex. Aún así, la mayoría de los mexicanos rechazan al capital privado en Pemex.
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