Primero salió Andrés Granier con que se sentía mal ayer en la mañana y lo hospitalizaron.
Según los doctores del hospital Ángeles del Pedregal, tiene hipertensión y le podría dar un infarto.
Las autoridades de Tabasco no le creyeron y pidieron que lo arraigaran.
Así que los abogados de Granier pidieron un amparo para que no lo llevaran a Tabasco. Que porque su salud corría peligro.
No les creo.
No les creo porque eso de que se sienten mal, y que los tienen que hospitalizar ha sido lo mismo que han hecho Augusto Pinochet, Miguel Nazar Haro, Alberto Fujimori, José Saíz, y hasta Carlos Ahumada para tratar de esquivar el tener que enfrentar a la justicia.
Pero principalmente, no les creo porque Andrés Granier dijo que estaba muy tomado cuando dijo el año pasado que tenía un montonal de camistas y zapatos.
¿Entonces emborracharse no lo pone en riesgo de hipertensión y de un infarto?
¿Y cómo es que todo este tiempo Granier nunca se quejó de ataques cardiacos?
Con otro detalle importante: si el propio Granier dice que lo difaman y que no cometió ningún delito ¿por qué le tendría que dar un ataque de hipertensión?
Mejor que Granier deje de hacerle al cuento y vaya a declarar a Tabasco. Finalmente, si dice que no hizo nada malo ¿entonces de qué se preocupa?
A menos, claro de que sí haya hecho algo indebido y por eso ya se puso nervioso.
Porque si no es por eso que lo hospitalizaron, entonces no puede uno más que creer que es puro show del priista.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario