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| El candidato aliancista a la alcaldía de Puebla, Tony Gali. |
Si ustedes hacen una búsqueda en Google sobre encuestas electorales de la elección por la alcaldía de Puebla, capital, se van a encontrar con que unas le dan la ventaja al candidato de la coalición PAN-PRD, Antonio Gali, y otras al priista Enrique Agüera.
Pero la realidad es que la ventaja es del candidato aliancista. Dos hechos lo sugieren:
1. Una de las encuestas recientes, que le dan 11 puntos a Agüera, en realidad fue financiada por el PRI de Veracruz, y tiene, por consiguiente, nula credibilidad.
2. Hace dos días el peñabot Enrique Aquino, quien trabaja para la campaña de Agüera, estuvo todo el día lanzando guerra sucia contra Antonio Gali por medio de Twitter.
¿Qué necesidad tiene el PRI de hacer guerra sucia contra el contrincante electoral si se supone que tiene 11 puntos de ventaja? Ninguna.
A menos, claro, que en realidad NO tenga esos 11 puntos de ventaja y, por el contrario, quien realmente tiene la ventaja es Gali.
Porque, OJO: el sainete que armó Aquino, conocido por su uso buro de bots, NO era para hablar bien de Agüera, sino para hablar mal de Gali. Eso quiere decir que en realidad están tratando de BAJAR la preferencia electoral de Gali.
Claro, los peñabots omitieron decirle a a la gente en su sainete que Agüera es amigo del góber precioso, Mario Marín, a quien no rechazó cuando se supieron todas las porquerías que hizo.
Tampoco dicen que Agüera es señalado por tener un jet privado y llevar a sus hijas de shopping a Miami, o que lo acusan en internet de haberse enriquecido usando dinero de la Benemérita Universad Autónoma de Puebla, donde fue rector.
Sí: Agüera es otro productor de juniors del PRI.
Tal vez por eso es que el PRI está tan desesperado por denostar al candidato aliancista. Porque saben que la gente sigue repudiando al PRI y a todo lo que huela a Mario Marín. Como Agüera, pues.
Foto: Tomada de internet
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