De acuerdo con Reforma, senadores acusaron a Madero de conducirse con "visión pequeña" desde la oposición y le reprocharon por el respaldo que le ha dado al gobierno de Enrique Peña Nieto.
Advirtieron además, como en el caso de José Rosas Aispuro, que si Madero remueve del cargo a Cordero, la bancada se dividirá, poniendo en riesgo la interlocución de la dirigencia con los senadores del PAN.
"Lo más lamentable es que Madero piensa que con esto le ayuda al Presidente Peña Nieto, pero está equivocado. El PAN en el Senado decidió no ser una oficialía de partes ni una ventanilla de trámites y así seguiremos, no vamos a dar cheques en blanco a nadie", dijo Rosas Aispuro.
Adicionalmente, la senadora Adriana Dávila exigió a Madero actuar como verdadero líder de oposición y no como aplaudidor de Peña Nieto.
"Espero que Madero escuche a los senadores del PAN porque sus declaraciones parecen más de un militante del PRI que de un líder de Oposición", declaró.
"El problema está en la visión tan pequeña que se tiene, en la que se pretende que sólo exista una línea. Pero el tema de fondo no se va a resolver si lo que se tiene es ceguera política", agregó.
"Puede cambiar a quien quiera, pero no se va a legitimar con eso y no van a poder callar a las voces que exigimos lo que se tiene que corregir en el Pacto", sentenció.
"Lo que veo es un PRI pegándole a los gobiernos del PAN y veo a un Madero deslumbrado por Peña Nieto", remató.
Advirtió que, con esta conducta, Madero pierde la mira de lo que es realmente importante para el partido.
Otros senadores panistas acusaron a Madero de usar al PAN para hacer ajustes de cuentas.
Por si fuera poco, el senador panista Fernando Herrera afirmó que por lo menos 32 de los 38 senadores del PAN respaldan a Cordero.
Madero amenazó ayer con remover a Cordero de la coordinación del PAN en el Senado por "desencuentros" que han tenido por el Pacto por México.
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