Augusto Pinochet y Juan Pablo Segundo |
De acuerdo con las revelaciones de WikiLeaks, el sustituto de la Secretaría de Estado del Vaticano, Giovanni Benelli, declaró que "como es natural, desafortunadamente, tras un golpe de Estado hay que admitir que ha habodp derramamiento de sangre en las operaciones de limpieza en Chile."
Esto ocurrió en un cable secreto de la embajada de Estados Unidos ante el Vaticano de acuerdo con la agencia AFP.
Un mes después del golpe de Estado, el 18 de octubre de 1973, Benelli expresó su "profunda preocupación, al igual que la del Papa, sobre una campaña internacional izquierdista que tergiversa completamente, y con éxito, la realidad de la situación chilena."
Dijo también que las críticas a la dictadura militar eran simplemente "propaganda comunista" y dijo que "los comunistas podrían influir en los medios de comunicación del mundo libre en el futuro."
El Vaticano jamás rompió relaciones con Pinochet ni condenó la dictadura militar.
Foto: Tomada de internet
No hay comentarios.:
Publicar un comentario