De acuerdo con Reforma, la propuesta fue hecha por un representante del gobierno federal duante una audiencia ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.
La representante de las víctimas, Bárbara Italia Méndez, dijo:
"No vemos posibilidades y no es nuestro deseo explorar una solución amistosa, pues el Estado ha demostrado en estos seis años no sólo una incapacidad para responder a nuestras demandas de verdad y justicia, máxime porque sus únicas acciones han estado relacionadas con la denuncia que hemos levantado a nivel interamericano e internacional, sino también sigue difundiendo información falsa sobre lo ocurrido en Atenco."
La petición de la solución "amistosa" a las 11 mujeres violadas por policías durante el operativo de Atenco ordenado por Peña Nieto fue hecha por el subsecretario de Asuntos Multilaterales y Derechos Humanos de la Secretaría de Relaciones Exteriores, Juan Manuel Gómez Robledo.
"Pedimos de manera solemne a esta Comisión que nos acompañe en la búsqueda de una solución amistosa, y de esta manera reparar a las víctimas", dijo Gómez.
Según la subsecretaria de Asuntos Jurídicos y Derechos Humanos de la Segob, Lía Limón, el gobierno mexicano tiene voluntad de reconocer las violaciones y ofrecer disculpas. Sin embargo, no ofreció llevar a juicio a Enrique Peña Nieto, quien ordenó el operativo.
De hecho, Lía Limón pretendió justificar a Peña Nieto alegando que los policías del Estado de México no obedecieron a órdenes superiores o a una estratagia estatal implementada cuando Peña Nieto era gobernador.
El operativo ordenado por Peña Nieto resultó en la muerte de dos personas, múltiples casos de brutalidad policiaca, 11 mujeres violadas, por lo menos 3 mujeres deportadas sin motivo que además fueron abusadas sexualmente, y diversos abusos y vejaciones de la policía.
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