Javier Duarte de Ochoa es de los gobernadores más nefastos que tiene el PRI y es además uno de los principales lambiscones de Enrique Peña Nieto.
Las razones para debilitar el poder de Duarte por medio de una alianza PAN-PRD y quitarle el control del congreso y de las alcaldías son varias. Por ejemplo:
1. Por el caso de las maletas con millones en efectivo. Siempre se sospechó que ese dinero era para la campaña de Enrique Peña Nieto y hasta la fecha no ha quedado del todo claro su origen y destino.
2. Por haber encarcelado a twitteros. Duarte es el único gobermador que ha ordenado encarcelar a twitteros sólo por retuitear reportes de inseguridad en Veracruz.
3. Por reprimir con violencia protestas contra Peña Nieto. Fue gente del gobierno de Javier Duarte la que estaba a cargo de la seguridad cuando un grupo de policías vestidos de civil reprimió a manifestantes que protestaban contra Peña Nieto en Córdoba, Veracruz.
4. Por pretender censurar a la prensa. Dos veces Duarte ha pretendido que se aprueben leyes mordaza en Veracruz. La última vez que lo hizo fue por medio de una reforma para que no se le diera publicidad oficial a quien criticara a los políticos.
5. Por su ineptitud ante la inseguridad en Veracruz. Vaya, la delincuencia ya asalta hasta vamiones ADO en Veracruz y nadie les pone un alto. Ni el gobierno de Duarte ni el de Peña Nieto.
Hay más, pero esas son las peores.
"¿Y los principios?", dirán algunos. Respondo: Creo que sería una falta mucho más grave a lis principios de izquierda si no hiciéramos nada para debilitar al PRI y a un gobierno tan nefasto como el de Duarte.
En todo caso, equivaldría a usar a los chuchos u al PAN para un buen propósito.
Y no; en 2018 la izquierda no haría alianza con el PAN. En 2018 la alianza sería sólo de izquierda. Pero si no debilitamos desde ahora al PRI, ni en alianza de izquierda lo podremos sacar del poder.
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