Basura, dice lo que somos texto por @sladogna, psicoanalista

Freud estudió los lazos simbólicos a imaginarios entre la producción de basura y los humanos, el impacto que ella tenía en el espíritu de los mismos. Lacan observó un detalle un poco más inquietante la basura constituye uno de los materiales que produce un plusvalor -una plusvalía del disfrute-, se trata de su lugar como objeto causante de un deseo. ¿Qué es la basura humana? Subrayó sólo los humanos producen basura, ella es su extensión en más de un sentido

Un día, a mediados del siglo noveno, en el noreste de la China, en el monasterio que dirigía Lin Tsi, el maestro de la secta budista T ch´ang (del sánscrito Dhyâna , "meditación"), subió a la cátedra y dictó una lección:

"Sobre vuestro conglomerado de carne roja hay un hombre verdadero sin situación, que sin cesar entra y sale por las puertas de la cara. ¡A ver qué opina de esto alguno que no haya hablado todavía!´ Uno de los monjes salió del grupo y preguntó cómo era el hombre verdadero sin situación. El maestro bajó de su banco de meditación y atrapando al monje e inmovilizándolo, le ordenó: "¡Dilo tú mismo, dilo!" El monje vaciló. El maestro lo soltó y dijo: "El hombre verdadero sin situación es un montoncito cualquiera de excremento´.Y se volvió a su celda".

La expresión "un montoncito cualquiera de excremento" es en su lengua original mucho más cruda pero, para su publicación se ha prefierdo sustituirla por la presente. Paul Demiéville sinologo francés y traductor, en 1977, de las Lecciones de Lin Tsi , comenta la brutal comparación, que resulta todavía sorprendente cuando nos informan que se la utiliza a menudo para designar a Buda: "toda definición del hombre verdadero sólo puede ser impropia, vil, sucia, puesto que por definición es lo que escapa a toda definición".

Aquí muestro una "estadística" de la basura que cada uno de nosotros produce, hace circular y que , además, la consumimos: Robert Van Otterdijk, un experto de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), asegura que entre el 10 y el 15 por ciento de los alimentos que se producen en el mundo terminan en la basura. Este porcentaje equivale a 1300 millones de toneladas que podrían alimentar a 870 millones de personas. De esos 1300 millones de toneladas, cien corresponden a desechos de comida en América latina. En Europa y Estados Unidos se desecha el 40 por ciento de lo que se produce, lo que equivale a la producción total de Africa.