De acuerdo con la agencia Xinhua, el gobierno boliviano declaró que expropió las empresas con el objetivo de hacer equitativas las tarifas y uniformar el servicio en áreas rurales y urbanas de las regiones donde operan.
Evo Morales declaró que con la medida se garantizará el derecho humanitario a la electricidad de los ciudadanos que viven en el área rural, precautelando su economía.
Dijo tambipen que en ambos departamentos, La Paz y Oruro, un usuario paga unos 0.63 centavos bolivianos por kilovatio/hora, mientras que en el área rural se pagan 1.59 bolivianos.
Además de las dos distribuidoras eléctricas, Morales nacionalizó la empresa de servicios Edeser y otra firma gestora de inversiones ligadas con Ibedrola.
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