De acuerdo con Proceso, el diario alemán señaló que el tráfico de drogas es ahora sólo una parte del gran negocio de las mafias mexicanas, y que lo complementan con el comercio y tráfico de materias primas.
A seis años de haber declarado la guerra contra el narco, dice Der Spiegel, el gobierno federal panista apenas y logró debilitar y desaparecer pequeños cárteles, "pero el poder del Estado no logró hacer nada a las grandes mafias. Ellas se volvieron incluso más poderosas".
Señaló también que Humberto Moreira no quiere dar nombres de los empresarios involucrados en la extracción de carbón de los Zetas en Coahuila "por miedo."
Entre las actividades no-relacionadas con la droga en las que incursiona el narco, dice el diario alemán, está la minería y el robo y tráfico de gasolina y petróleo.
Todo esto gracias a la corrupción y las redes que han extendido las bandas de criminales, señala.
Critica también el uso del ejército y la policía para combatir al narco como la única manera de hacerlo, y señala que el quitar a un capo sólo dejab un vacío y el resultado es más violencia.
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