Los datos que tengo sobre Ruy Salgado

Por Victor Hernández

Ayer por la noche los ahora ex colaboradores de Ruy Salgado dieron a conocer que Ruy les dio versiones distintas sobre su estado de salud, situación económica y paradero, y que en general les dijo mentiras varias. Pero, aclararon, no había elementos para poder afirmar si Ruy estaba bien o si estaba mal.

Dieron también varios datos personales que yo no quise revelar por respeto a la privacidad de Ruy, pero en vista de que ya está fuera la información, creo que lo único que me queda es dar a conocer los datos que yo tengo sobre Ruy y que no se dijeron en la transmisión.

Estos datos, aclaro, los doy a conocer sin el afán de pelearme con nadie. Es simplemente lo que yo pude investigar sobre la situación de Ruy y el posible por qué de su retiro. Lamento si esta información resulta molesta a los ex 5antuaristas, pero es lo que yo pude investigar. Desde luego el espacio está abierto para réplica si así lo desean.

Para empezar, es verdad lo que dijeron sobre una deuda monetaria que Ruy tenía con su padre. Eso se lo escuchamos varios a Ruy en persona y que no tenía ingreso. En el momento en el que Ruy mencionó la deuda, yo supe que no iba a poder aguantar mucho tiempo haciendo el 5antuario, y que eventualmente se tendría que retirar.

Lo supe porque yo pasé por una situación similar en 2006 con el antiguo Sendero. Fue por eso que en ese entocnes empecé a solicitar donativos para el blog y es por eso que lo hago ahora con blogdeizquierda.com. Estos proyectos no se pueden sostener sin algún ingreso que garantice estabilidad económica para quienes literalmente estamos trabajando para poder informar. En el caso de Ruy, simplemente llegó a su límite.

El límite de Ruy tenía otra vertiente: su salud. Yo a Ruy lo vi en muletas varias veces. Y cuando no las usaba, las tenía de todos modos en la cajuela de su auto. Yo las ví.

¿Qué enfermedad tenía Ruy? Honestamente no lo se. Se de una fuente independiente, ajena a los 5antuaristas y que conoce bien a Ruy, que sí existía la posibilidad de que tuviera cáncer. El problema es que Ruy no tenía seguro social, y el seguro médico con el que contaba sólo le cubriría 30% de los gastos en caso de que fuera cáncer. Por esa razón, la única fuente a la que Ruy podría acudir para tratarse su problema médico era su padre.

El problema, según un testimonio que pude recabar, es que el padre de Ruy no estaba de acuerdo con que siguiera haciendo El 5antuario. Por lo cual Ruy tenía dos opciones: o su salud o El 5antuario.

Así que Ruy no "desapareció" porque lo haya amenazado el gobierno, o el narco, o etc. Se retiró por una decisión muy personal y muy entendible basada en economía y salud.

Ruy Salgado, no obstante, se encuentra bien. Lo se porque dos veces fue visto conectarse a internet: el 15 de septiembre por la tarde y el 20 de septiembre por la mañana.

Esto se sabe porque Ruy tenía habilitado su programa de Skype para correr automáticamente al prender su computadora. Los que usamos Skype sabemos que cuando algún contacto corre el programa y accede a su cuenta, aparece una notificación color naranja en la esquina inferior derecha de la pantalla avisando al estilo de "fulano se acaba de conectar a Skype".

Pues bien, esa notificación apareció dos veces: el 15 de septiembre por la tarde y el 20 de septiembre por la mañana. Las notificaciones fueron vistas por alguien, que, como dije, conoce a Ruy.

Me enteré de otros datos. Estos son los datos que no le van a gustar a los ex colaboradores de Ruy.

Según una fuente independiente consultada por un servidor, que conoce bien cómo operaba El 5antuario, había problemas entre Ruy y su equipo. Esta fuente asegura que quien realmente estaba constantemente preocupado por las visitas era el colaborador Gokú Sayayin, y que Ruy presuntamente estaba cansado de las fricciones con El 5antuario.

Otro testimonio señala que el equipo de El 5antuario se manejaba con mucho recelo, donde era mal visto que alguien del equipo hablara con personas externas.

Este testimonio indica que hubo una tercer visita a la casa de Ruy Salgado para ver si se encontraba, pero no se le encontró. Empero, cuando el equipo de El 5antuario se enteró de que se había comentado esta tercera visita fuera del equipo, se molestaron. Ignoro por qué.

Menciono esto porque considero que si hubo fricciones dentro del 5antuario también pudieron haber pesado en la decisión de Ruy de dejar el proyecto sin decir nada. Aunque, según supe después, una persona cercana a Ruy afirma que no es la primera vez que Ruy se retira de algún proyecto de manera intempestiva.

Sobre esas fricciones que señala este testimonio, no obstante, no se dijo nada en la transmisión de noche.

Respecto a las amenazas que recibió Ruy, es verdad lo que dijeron en El 5antuario: La PGR no lo amenazó. Ya lo expliqué en otra columna: A Ruy le dijeron una versión que lo hizo suponer que lo amenazaron, pero en realidaad eso no ocurrió. El gobierno panista es de lo peor y el priista es aún peor, pero en este caso en particular no hubo amenazas. Y se los digo yo que sí recibí amenazas de una funcionaria priista de Chihuahua y de una ex regidora priista de Durango. A las dos simplemente las denuncié y las tiré al león.

Lo de Canadá: No, Ruy no se fue a Canadá. El me dijo por teléfono que sí se había ido pero yo no le creí. No le creí porque en sus transmisiones "desde Canadá" el fondo eran paredes de concreto, cuando en Canadá no se usa el concreto, sino la tablarroca y la madera. Y para las bodegas se usan bloques de concreto o ladrillo, pero sin acabado. Y segundo, porque Ruy siempre usó "en Canadá" la misma lámpara de mesa que usó en sus transmisiones en México. ¿Se fué a Canadá con todo y lámpara?

Finalmente, voy a decir que yo llamé a los dos teléfonos de Ruy el viernes 14 de septiembre. Uno, un celular, estaba apagado. Y el otro mandaba a una contestadora a los dos timbres. El hecho de que esa contestadora haya estado funcionando a los dos timbres significa que sí había alguien en casa de Ruy, pero que no querían contestar y esperaban a que la máquina les dejara escuchar primero quién era (nadie pone su contestadora a los dos timbres porque no alcanza el tiempo para contestar).

Ah, y por cierto: un año antes, por las mismas fechas, Ruy se había ido de vacaciones con su familia, por lo cual, de acuerdo con una versión, por esas fechas lo más factible es que hubiera salido de viaje. Lo digo porque se mencionó que un vecino dijo que habían visto a la familia de Ruy haciendo maletas.


Lo que pienso de todo este relajo

Mis conclusiones sobre este asunto son las siguientes:

1. He insistido desde el principio que Ruy Salgado se retiró por una decisión personal. Lo sigo sosteniendo. Lamentablemente, varios izquierdistas no lo quieren creer porque forzosamente quieren un mártir o ven moros con tranchete donde no los hay.

2. Ruy sí dijo mentiras, pero puedo entender que lo haya hecho si de verdad quería proteger su identidad y si existían fricciones en su equipo o si estaba buscando la manera de salirse del proyecto. Aquí los que creo que perdieron los estribos fueron sus colaboradores. NUNCA debieron haberse tomado tan en serio lo que Ruy decía y siempre debieron haberse enfocado en la información, no en los dramas internos, ya que esos le corresponde resolverlos a cada quien por su cuenta. Vamos, mi actitud con Ruy siempre fue "Ah ¿te fuiste a Canadá? Ándale pués. Te fuiste a Canadá." Y ya.

(Paréntesis: en la segunda parte del Quijote de la Mancha le pregunta una condesa a Sancho Panza por qué le cree sus estupideces a Don Quijote si el propio Sancho sabe que está loco. Sancho le piensa un poco, se levanta, camina, y responde que sí, que él sabe que Don Quijote está loco, pero si él dice que hay encantamientos y jalada y media, él va a decir que le cree y punto. Detalle: Sancho nunca fue tan pendejo como para, por ejemplo, darse 2 mil azotes para "desencantar" a Dulcinea del Toboso a pesar de que se lo pidió Don Quijote.)

3. Fue una decisión sumamente estúpida por parte de Ruy el haberse retirado sin decir nada. No por la preocupación que le pudo haber generado a sus colaboradores -los colaboradores debieron haberlo tirado al león y ya- sino porque un sector del público de izquierda es muy propenso a la paranoia y a la sicosis. Aún así, entiendo que Ruy haya sentido que el proyecto era ya demasiado para él y haya decidido retirarse sin decir nada. A mi me pasó en 2006. Cuando cientos de lectores del antiguo Sendero me preguntaban "¿y ahora qué hacemos? ¿Y ahora qué hacemos?" por el fraude, simplemente apagué la computadora y me fui de mi casa, dispuesto a no regresar a internet. La presión fue demasiada. Pero, a diferencia de Ruy, a mi sí se me logró convencer (una persona en San Diego) de que siguiera con el proyecto. Por consiguiente, y porque he estado en esos zapatos, no voy a exigirle a nadie que tenga la fuerza para tomar esa decisión. Nadie tiene por qué cargar con esa responsabilidad si siente que ya no puede. Yo lo hice, pero no espero lo mismo de nadie más.

4. Pero mucho más estúpido aún fue lo que hicieron los ex colaboradores de Ruy y la gente de Grillonautas al ir a abrir la boca con Reporte Índigo. Jorge Mireles claramente se los chamaqueó. ¿Y se quejan de Ruy? Pero además ¿qué ganaban dándole parque a Reporte Índigo para que publicara tonterías de Ruy? ¿Cuál era el objetivo de semejante idiotez? ¿Desquitarse de Ruy? ¿Presionarlo para que hiciera algo que claramente no quiere hacer? ¿Tan difícil les resultaba admitir que, sí, en efecto, a veces la gente ya no puede más y no le queda otra más que irse? Manejaron muy mal la situación, se les salió de las manos, y todo por no querer actuar con un poco de sentido común, sino por con sicosis, paranoia y al parecer enojo.

5. También debo decir que lamentablemente mucha gente en la izquierda aún no ha aprendido que debe cuestionar TODO. Hasta a las fuentes más confiables. No por una cuestión de paranoia o de desconfianza, sino de objetividad. Todo dato debe ser revisado y cotejado para poder determinar la realidad. Cuestionen este texto que estoy escribiendo.

6. Y también debo decir de la izquierda que lamentablemente aún cree que necesita de héroes para poder funcionar. No es así. Ruy Salgado construyó un personaje que funcionó para informar, pero no por eso dejó de ser un ser humano con virtudes y defectos. El público idealizó a Ruy y pensó que era algo que no era: un super-humano. Y cree que si el héroe, o el líder se cae, entonces ellos ya no se pueden levantar. Pero no es así.

7. Ahora veo un linchamiento contra Ruy Salgado por parte de gente que, la verdad, pareciera como si lo que realmente le cala no es que Ruy haya querido proteger su identidad no revelando su verdadera situación, sino que él sí tuvo el éxito que ellos no.

8. ¿Qué pienso que se debe hacer ahora? Nada. Respetar la decisión de Ruy y ya. A su público Ruy nunca le pidió nada. Siempre les dio GRATIS su trabajo y su tiempo. ¿Y se quejan de que ya no quiera seguir? Pues me disculpan pero que lamentables son los que creen que encima de que les regalaron trabajo durante 2 años sin pedir nada a cambio, de pilón se sienten con derecho para exigir explicaciones de que ya no les dan más.

"¡Es que nos preocupamos mucho!" dirán los 5antuaristas y el público. ¿Y? ¿O sea que les puede más la preocupación que el sentido común? ¿Nunca les cayó el veinte de que si no estaba Ruy en Locatel, ni había denuncias de sus familiares por desaparición, entonces simple y sencillamente Ruy estaba tratando de alejarse por su propia decisión?

¿Era necesario que difamaran y que generaran un linchamiento para Ruy sólo porque no se conformó a sus expectativas? ¿No fueron capaces de atar cabos y de darse cuenta de que Ruy también tenía limitaciones?

En fin. Espero que el caso del 5antuario sirva para que la izquierda haga una profunda reflexión sobre la manera en la que idealiza a personajes, y no cuestiona la información que recibe si el cuestionamiento no se ajusta a su sistema de idealización.

Y espero también que ya deje la izquierda de caer en la sicosis y en la parálisis, y que ante todo deben prevalecer el sentido común, la cabeza fria y los datos duros por encima de las idealizaciones y las emociones.