El martes pasado publiqué en esta columna que el PAN y el PRI ya tienen listo el engaño al público para aprobar la reforma laboral. Dije textual:
"Básicamente el PAN va a decir que el único cambio es con lo de los sindicatos. Y el PRI va a decir "bueno, quiten lo de los sindicatos", declarará que es un triunfo de los trabajadores, y agarraditos de la mano el PAN y el PRI aprobarán la nefasta reforma laboral que vulnerará a los derechos de los trabajadores.
De esa manera el PAN y el PRI logran sus dos objetivos: explotar más a los trabajadores y mantener intactos los privilegios de los caciques sindicales.
A eso se reduce el engaño del PRI y del PAN con la reforma laboral."
Pues ayer miércoles, Proceso publicó que el PRI, en efecto, rechaza aprobar la transparencia en los sindicatos, pero sí lo demás, como el permitir el outsourcing. Mire usted lo que dice Proceso:
"Existe una gran posibilidad de que la figura de la subcontratación (outsourcing) sí pase en la reforma a la Ley Federal del Trabajo, sin embargo, la rendición de cuentas de los sindicatos no, ya que ésta se ofrece cada seis meses a sus agremiados, comentó el presidente de la Comisión del Trabajo en la Cámara de Diputados, el priista Carlos Aceves del Olmo."
¿Qué más les puedo decir? SE LOS DIJE.
Esperemos que Martí Batres pueda interponer una controversia constitucional contra la reforma laboral, ya que al no existir una ley reglemantaria para las iniciativas preferentes, como lo es la reforma laboral, no se le debería dar ese trato.
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