Reforma publicó una nota ayer por la noche en la cual afirma que el PRD se enfrenta a dilema "de hasta donde llevar su inconformidad por la reforma laboral."
Que la bancada del PRD tuvo reuniones internas para pedir que se protestara para mostrar su inconformidad ante la reforma laboral durante la votación en el pleno, ya fuera con playeras de protesta, o con mantas, o tomando la tribuna.
Y que según Silvano Aureoles, coordinador de la bancada, el PRD no ha decidido tomar la tribuna. Que porque no hay prisa para que se presente el dictamen ante el pleno y que porque hay tiempo para que se discuta todo lo necesario en la Comisión del Trabajo.
¿Discutir? ¿Es que Aureoles no se dio cuenta de que el PRI y el PAN se hicieron un 69 legislativo junto con su gimp el PVEM para desechar todos los reclamos del PRD y aprobar haiga sido como haiga sido la reforma laboral tal y como quieren Enrique Peña Nieto y Felipe Calderón?
Es decir, discutiendo el PRD no va a lograr nada.
El supuesto as bajo la manga del PRD, según Aureoles, es el voto particular -que finalmente se lo van a rechazar uno a uno, tal y como ocurrió en comisiones- y a lo mejor una moción suspensiva al momento de su votación en el pleno.
Así que eso no va a lograr nada tampoco.
La pregunta es: ¿Le faltan güevos al PRD para tomar la tribuna e impedir de esa manera la reforma laboral? ¿Les pesa bloquear las salidas del salón de sesiones para que nadie pueda irse a otro salón a votar y rodear a la mesa directiva para que no pueda llamar a votar?
¡Chingada madre! ¡SON LA SEGUNDA FUERZA POLÍTICA EN LA CÁMARA!
Gerardo Fernández Noroña y Mario Di Costanzo lo han dicho: con SEIS legisladores de izquierda lograron impedir la reforma laboral en la anterior legislatura. Ni modo que no puedan con más de 100.
Lo único que les falta son TAMAÑOS para hacerlo. Y ponerse a pensar que si no lo hacen, cuando MORENA sea partido van a perder un montón de votos y de curules.
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