Cuauhtémoc Cárdenas publicó ayer un escrito en su blog con el cual pretende criticar a la izquierda, pero lo hace con las patas, al grado de que los únicos que le aplaudieron fueron los panistas.
Sólo dos aciertos tuvo Cárdenas en su escrito: pedir una reforma electoral que impida la compra de votos y oponerse a las alianzas con el PAN. Todo lo demás fue una bonita colección de falacias. Mire usted:
La primer falacia que comete Cárdenas es quejarse de los resultados electorales que tuvo la izquierda el primero de julio. Que porque por el porcentaje que tuvo Andrés Manuel López Obrador respecto a 2006 y que porque ganaron en menos distritos que en 2006.
Omite, no obstante, dos cosas:
1. Que AMLO tuvo más votos que en 2006 y la izquierda pasó de tercera fuerza política en 2009 a segunda.
2. Que el PRI COMPRÓ 5 MILLONES DE VOTOS. El tratar de calificar el resultado electoral de la izquierda al hacer un comparativo porcentual con votos fraudulentos del PRI no sólo es una falacia, sino de plano validación del fraude priista. Si eliminamos los 5 millones de votos fraudulentos del PRI, los porcentajes quedan así:
EPN: 14.22 millones de votos 31.39%
AMLO: 15.89 millones de votos 35.07%
JVM: 12.78 millones de votos 28.21%
GQ: 1.15 millones de votos 2.53%
Pero no; Cárdenas dio como buenos los votos fraudulentos en su texto y en base a votos fraudulentos fustiga a la izquierda.
Luego se queja de malos resultados en las campañas de afiliación del PRD, pero omite decir que millones de mexicanos prefirieron afiliarse a MORENA, en vez del PRD, porque no quieren saber nada de los Chuchos.
Y de los Chuchos Cárdenas, que es su líder moral, desde luego no dijo nada.
Dijo además:
"No ha habido en el curso de un sexenio, para no ir más atrás, trabajo de organización que hubiera permitido ampliar y consecuentemente fortalecer las bases ciudadanas y territoriales del partido. Donde las votaciones han sido bajas, siguen siendo en lo general bajas."
Para empezar el simple hecho de afiliar a un partido no es garantía de voto. Y en segundo lugar, la izquierda sí hizo un fuerte trabajo de organización territorial con MORENA. Que Cárdenas no trague a MORENA y no lo quiera reconocer es otra cosa.
La tercer falacia de Cárdenas es pretender fustigar al PRD por sus pleitos internos cuando esos pleitos internos fueron mucho más severos en el PAN y en el PRI. Dijo:
"El PRD no supera su condición de partido de confrontaciones internas y de cuotas para la asignación de cargos y oportunidades según los pesos relativos de las corrientes".
Cárdenas omite decir -convenientemente- que las confrontaciones internas fueron las que le costaron la derrota casi absoluta al PAN y al PRI en el DF y al PAN a nivel nacional.
(Irónicamente, el pelmazo de Federico Döring le aplaudió a Cárdenas por atacar al PRD. Claro, omitió ver la viga en el ojo propio.)
Según Cárdenas, el sectarismo del PRD se ve reflejado en las coordinaciones del Senado de la Cámara de Diputados, las cuales se repartieron entre las tribus.
Lo que Cárdenas no dice es que también el PRI se repartió las coordinaciones entre corrientes: La Cámara de Diputados para la corriente de Manlio Fabio Beltrones, y la del Senado para la de Peña Nieto por medio de Emilio Gamboa.
Algo parecido pasa con el PAN, ya que le dierno la coordinación del Senado a la corriente calderonista por medio de Ernesto Cordero y la cámara de diputados.
Y de pilón dice que el PRD es el partido de tribus y cuotas, de sectarismos y oportunismos, de clientelas y de no militancias libres, por lo cual está destinado al achicamiento y a los fracasos.
Hmmm... qué raro. Porque el sectarismo, el oportunismo, la no militancia libre, y desde luego el clientelismo, es exactamente lo que tienen el PAN y el PRI. Pero Cárdenas, como los medios electrónicos, sólo ve problema en que eso ocurra en el PRD.
Peor aún: pretende que en el PRD sólo haya una línea. Dijo:
"El PRD debe ser un partido de una sola línea. En función de ella deben actuar las dirigencias nacional, estatales y municipales, los gobiernos del partido, sus legisladores federales y locales."
¿Pues no que un partido de militancia libre? ¿No va a respetar cárdenas la libertad de los militantes del PRD? ¿Cómo quiere entonces que se afilie la gente?
Todo lo demás en el texto de Cárdenas son las propuestas que la izquierda ha hecho desde hace años. Qué bueno que las siga promoviendo. Pero todo lo demás, a excepción de los dos puntos que ya mencionamos al principio, son una muestra de que lo que realmente quiere Cuauhtémoc Cárdenas es controlar al PRD a su gusto.
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