Todas las acusaciones que ha lanzado el PRI contra Andrés Manuel López Obrador para tratar de desviar la atención del Soriana-gate, Monex-gate y otros tantos "gates" de irregularidades electorales de Enrique Peña Nieto se han caído uno tras otro. Generalmente desmentidos por el propio AMLO con documentos y datos duros.
El más reciente es una acusación del PRI contra Javier Núñez López, creador de la Asociación Civil Austeridad Republicana, quien además es socio de la empresa SAD Desarrollo y Transparencia.
SAD, acusa el PRI, obtuvo contratos con el Gobierno del DF por 92.7 millones de pesos. Y según el PRI, eso es evidencia de desvío de recursos del erario para la campaña de AMLO.
Pero eso es una mentira más del PRI. Mire usted:
Para empezar, el propio AMLO desmintió ayer que Javier Núñez fuera cercano a él o que impulsara al movimiento lopezobradorista.
Yo que conozco al equipo de trabajo de AMLO y a sus simpatizantes puedo respaldar lo que dice López Obrador. Javier Núñez simplemente no figura como cercano al político tabasqueño.
López Obrador sí conoce a Javier Núñez, no obstante. Lo declaró ayer mismo. Pero no tiene ninguna relación con él.
En segundo lugar, la acusación del PRI es un refrito de la acusación que hicieron directamente contra Austeridad Republicana, la cual no tuvo sustento.
Tercero y más importante: Inclusive si una empresa de la cual es socio el fundador de Austeridad Republicana AC hubiera tenido contratos con el GDF, eso, en sí, no es evidencia de que:
A) La empresa no tuviera méritos para obtener los contratos.
B) Que TODO el dinero hubiera ido a manos de uno de los socios, en este caso Javier Núñez.
C) Que de ahí el dinero hubiera ido a la campaña de AMLO.
Y dado el hecho de que la campaña de AMLO sólo usó el dinero que legalmente podían gastar los partidos políticos, entonces el PRI no tiene ningún caso que se pueda sostener contra el Peje.
En cambio, AMLO sí ha presentado evidencias tangibles de que el PRI obtuvo tarjetas de Monex por medio de empresas fantasma para rebasar los topes de campaña en la elección presidencial, de que el PRI compró votos con tarjetas de Soriana.
En el caso de Monex, por cierto, a pesar de que el PRI siempre negó todo en un principio, al final siempre ha terminado aceptando que sí hizo lo que se le acusa.
Lo que pasa es que el PRI sabe que las acusaciones de AMLO contra Peña Nieto por el fraude electoral que perpetró sí son lo suficientemente fuertes como para invalidar la elección presidencial. Si los magistrados del TEPJF acataran la ley y la Constitución, desde luego. Y saben que las acusaciones de AMLO le impiden al PRI tener la manga ancha que querían tener para hacer lo que se les pegara la gana.
Por eso difaman a AMLO inventándole mentiras. Nada más.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario