Un lector me escribe y me comenta que Elena Achar, la mujer señalada por haber grabado el audio del supuesto charolazo de Andrés Manuel López Obrador que en realidad nunca ocurrió, sí trabaja para la campaña de Josefina Vázquez Mota.
Esto resulta sumamente hipócrita por parte de la campaña de Vázquez Mota si consideramos que la que sí paso charola, sí cobró, y hay pruebas de que lo hizo, fue ¡Josefina Vázquez Mota!
No lo digo yo. Lo dice el director de la Coparmex-Puebla, Carlos Anaya, quien relaato a Proceso que el domingo 3 de junio Vázquez Mota organizó una comida en un salón de Cholula en donde para poder asistir, diversos empresarios tuvieron que pagar una colaboración de mil a 50 mil pesos, y que hubo quienes pagaron hasta más.
¿Como se atrevió entonces Josefina a criticar el supuesto charolazo de AMLO que ella misma sabía que nunca ocurrió?
Y no es la única acusación que hay contra Vázquez Mota por charolazos. También la señalan por haber pasado charola con empresarios de Nuevo León.
¿Cuánto está recaudando entonces Vázquez Mota con estos charolazos? Dudo que sea sólo 6 millones de dólares.
Lo gracioso de esto es que los empresarios están tirando el dinero a la basura. Josefina Vázquez Mota no sólo está en tercer lugar, sino que su tendencia sigue siendo a la baja. ¿Para qué gastar en una campaña que está destinada al fracaso?
Si tanto les preocupa que regrese el PRI, entonces a quien esos empresarios deben apoyar es a Andrés Manuel López Obrador, ya que él es el único candidato que puede derrotar a Enrique Peña Nieto.
Por eso mejor AMLO 2012.
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