Stratfor cita declaraciones de Peña Nieto para Reuters en las cuales "expresó el deseo de crear una nueva gendarmería nacional, o fuerza policial paramilitar, para usarse en vez del ejército mexicano y la marina actualmente usadas para combatir a los altamente armados cárteles en los puntos más violentos de México."
Stratfor indica que la fuerza paramilitar que quiere Peña Nieto tendría 40 mil agentes.
Stratfor señala que los soldados no son óptimos paa funciones de seguiridad pública, y que el uso de militares de esa forma ha producido acusaciones de abusos de derechos humanos, así como críticas y presiones a la administración de Felipe Calderón.
La consultora indica que es posible que Peña Nieto y sus asesores se hayan influenciado por los paramilitares colombianos para planear tener su propia fuerza paramilitar.
Cabe recordar que el PRI ha usado paramilitares con anterioridad para atacar a poblaciones indígenas en Chiapas y Oaxaca. De hecho, la masacre de Acteal, en 1997, fue precisamente a manos de paramilitares priistas.
Stratfor también señala que si Peña Nieto es electo presidente, sería difícil que su administración pudiera crear una nueva agencia policiaca que fuera incorruptible. Añade que el gran problema con la policía en México ha sido precisamente la corrupción.
Cabe recordar que el director de tránsito del estado de Edomex, cuando Peña Nieto era gobernador, fue grabado admitiendo que permite sobornos para que operen delincuentes en el transporte público.
La razón por la cual Stratfor no considera que Peña Nieto podría crear una nueva policía incorruptible es por la experiencia en las operaciones anti-narcóticos en Guatemala, donde se creó una nueva institución policial a mediados de los 90s; el Departamento de Operaciones Anti-Narcóticos (DOAN).
Pero el DOAN, el cual inclusive recibió apoyo del gobierno de Estados Unidos, se corrompió en pocos años y empezó a torturar y matar a contrabandistas de narcóticos; luego empezó a robar y vender sus cargamentos. Finalmente, el DOAN tuvo que ser desmantelado en 2002 porque "esencialmente se convirtió en una organización de tráfico de drogas."
México también ha tenido una larga historia de agencias policiales que han tenido que ser desbandas, dice Stratfor, incluyendo la AFI, creada por Vicente Fox en 2001, la cual había reemplazado a la Policía Judicial Federal.
"La AFI mexicana y el DOAN de Guatemala demuestran que inclusive una institución policial competente, bien pagada y bien equipada no puede sostenerse sola en una cultura que no está preparada para apoyar y ayudar a que mantenga su integridad. Al pasar el tiempo, la institución tomará las características de la sociedad que la rodea", dice Stratfor.
"Esto significa que la creación de una uneva agencia policial paramilitar por la próxima administración ayudaría a resolver el problema que afecta a México sólo en lo que respecta a aplicar conductas militares en las funciones de seguridad pública, pero no es la respuecta a los problemas de fondo en México", agrega.
"Resolver estos problemas requierirían un enfoque holístico, mucho más allás de las instituciones policiales y militares para resolver los profundos problemas económicos, sociales y culturales del país. Ese cambio holístico no será fácil de lograr. Requerirá mucho tiempo, dinero, esfuerzo y —críticamente— liderazgo. El próximo presidente de México tendrá sus manos llenas", concluye.
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