Ayer por la tarde fue asesinado a tiros en la Ciudad de México el militar retirado Mario Alberto Acosta Chaparro.
Los jóvenes de 18 a 24 años no recuerdan cómo era México con el PRI. Los que sí lo recordamos, sabemos que Acosta Chaparro era parte del aparato represor más siniestro y gejocida del PRI cuando era el partido en el poder.
Acosta Chaparro fue fundador de la Brigada Blanca, grupo paramilitar formado por el gobierno del priista Luis Echeverría en 1976 con el objetivo de combatir a "comunistas" que en realidad eran guerrilleros y opositores a la dictadura del PRI.
Los métodos de la Brigada Blanca eran la desaparición, la tortura y el asesinato. El propio Acosta Chaparro fue acusado de haber torturado o matado personalmente a 200 guerrilleros y campesinos. Lo acusan también de arrojar detenidos al mar desde aeronaves de la Fuerza Aérea Mexicana.
La crueldad de la tortura que aplicaba Acosta Chaparro era equiparable con la de otro de los más crueles torturadores del PRI: Miguel Nazar Haro.
¿Perseguía realmente "comunistas" Acosta Chaparro? No. Eso quedó demostrado en los 1990, 7 años después de que se desban la Brigada Blanca, cuando quizo pedir más presupuesto para actividades contrainsurgentes alegando una supuesta conjura comunista, lo cual era imposible por dos razones:
1. Que su reporte estaba plagado de errores y mentiras, metiendo nombres de gente que ya había recibido amnistía.
2. Para ese entonces ya había caído el muro de Berlín y la Unión Soviética estaba por colapsarse.
Es decir, el supuesto combate al comunismo era en realidad un pretexto para exterminar opositores al PRI.
Algunas de las víctimas de la tortura de Acosta Chaparro sobrevivieron y lo denunciaron, pero, típico del PRI, además de que le dieron plena impunidad, el gobierno priista lo declaró patriota y militar ejemplar.
Nadamás que el "patriota" y "militar ejemplar" fue acusado también de trabajar y proteger al cártel de Juárez en el año 2000, por lo cual estuvo preso hasta 2007, cuando fue liberado por los militares de Felipe Caldarón supuestamente por falta de pruebas en su contra.
¿Había tenido algo que ver con el narco Acosta Chaparro? Si no era el caso, entonces los dos atentados a balazos contra Acosta Chaparro, uno en 2010 y otro en 2012, en el que finalmente perdió la vida, simplemente no se explican.
Como dije al principio, los que sabemo cómo era el PRI, los que nos acordamos del miedo que se vivía en México con la dictadura priista —miedo a sus torturadores y asesinos— sabemos que de regresar el PRI al poder, con Enrique Peña Nieto, una vez más regresarían los represores como Acosta Chaparro, o como Nazar Haro.
México no merece que eso vuelva a ocurrir jamás. Ya suficiente violencia vive el país con un sexenio de guerra inútil contra el narco de Felipe Calderón.
Por eso mejor AMLO 2012.
PD: ¿Tienes de 18 a 24 años? Lee un poco de historia sobre cómo era México con el PRI. Pregúntale a los que tienen más de 30 años. No votes en la ignorancia. Si los mexicanos sacaron al PRI del poder fue por dos razones: por corrupto y por asesinos.
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