Ayer por la tarde el gobernador priísta del Estado de México, Eruviel Ávila, dijo por medio de Twitter que la procuraduría de justicia del Edomex había capturado al feminicida "El Coqueto".
Luego, en un mensaje grabado en video, Ávila Villegas dijo nuevamente que fue la PGJEM la que capturó al Coqueto.
Mintió las dos veces. La que capturó al Coqueto fue la policía del DF en una casa de la colonia La Malinche, en la delegación Magdalena Contreras, de la Ciudad de México.
Lo que la Procuraduría del Edomex sí hizo fue dejar que El Coqueto se fugara. De hecho, dos de los guardias que le ayudaron a fugarse siguen prófugos.
Y la corrupción en la policía del Edomex es algo que data de la administración de otro priísta llamado Enrique Peña nieto y apodado El Copeto.
¿O ya no se acuerdan que al jefe de tránsito de Peña Nieto lo grabaron dándole clases a sus policías de cómo pedir mordida? ¿No se acuerdan cómo dijo que permitía que delincuentes operaran el transporte público a cambio de dinero?
Claro, ahora Eruviel Ávila pretende hacerse el muy mano dura diciendo que va a pedir cadena perpetua para El Coqueto. Nadamás que eso es una fanfarronada si consideramos que se le acusa de 7 homicidios. Si lo encuentran culpable de dos, acumula 100 años de prisión. Resulta redundante pedir cadena perpetua.
Lo que son las cosas: la policía priísta de Eruviel Ávila, heredada de Enrique Peña Nieto, deja ir a El Coqueto, y la policía perredista de Marcelo Ebrard, heredada de Andrés Manuel López Obrador y Alejandro Encinas, lo captura.
Por eso mejor AMLO 2012.
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