Otra prueba de que Andrés Manuel López Obrador no tiene pleito con los empresarios ni opera en su contra: avala que empresarios de Nuevo León sean candidatos por Movimiento Progresista.
Sí; ayer, en el marco de un evento en Nuevo León, López Obrador fue testigo de honor en el convenio de Movimiento Progresista y la agrupación Despierta México para abrir candidaturas a los ciudadanos.
Bueno, "ciudadanos" es un eufemismo, ya que en realidad se trata de empresarios. Por ejemplo:
Cristina Sada es candidata para el Senado y tiene trayectoria como empresaria; Ricardo González Sada es precandidato a Alcalde de San Pedro y fue ex dirigente de la Coparmex.
En lo personal no le veo ningún problema a que la izquierda abra sus candidaturas a empresarios. Yeidckol Polevnsky es empresaria y fue dirigente de Canacintra.
Supongo que a la ultra-requete-mucha izquierda no le va a gustar la idea de que empresarios sean candidatos de Movimiento Progresista, pero como bien ha dicho AMLO, actualmente ser de izquierda significa ser honesto y tener buen corazón.
Para ser de izquierda, por lo tanto, no se requierie de ser marxista, ni castrista, ni chavista, ni socialista; con estar en la disposición por ver por el bien de todos, es más que suficiente para ser de izquierda.
Creo que eso es lo que está logrando la conciliación entre AMLO y el empresariado. Y eso es algo bueno. Porque AMLO nunca ha tenido nada contra los empresarios. A quienes ha criticado es a unos cuantos grandes empresarios y banqueros que nisiquiera generan la mayoría de los empleos del país, pero que son los que más se benefician al amparo del poder público.
Por eso mejor AMLO 2012.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario