Alejandra Barrales se reunió este viernes con Marcelo Ebrard, obviamente para tratar el tema de la candidatura de izquierda al GDF.
De acuerdo con Milenio, Barrales no salió contenta de la reunión. Cuando la prensa le preguntó que si de qué habían hablado, la respuesta de la asambleista fue "de muchad cosas" visiblemente irritada.
Y cuando le preguntaron que si reconocería el triunfo de Miguel Ángel Mancera, la respuesta fue: "buenas tardes" y se fue.
No son buenas noticias para la izquierda en el DF. Si continúa el enojo de Barrales, el PRI con toda facilidad le podría ofrecer la candidatura a Jefa de Gobierno que tenía reservada para Beatriz Paredes.
Por una sencilla razón: porque Patedes está de 10 a 13 puntos abajo de Mancera, pero Barrales estaría sólo a unos 4 puntos de distancia, facilmente remontables si se hace campaña para los electores de izquierda que están convencidos de que Mancera no es de izquierda.
Si los que buscaron sacarle dinero a Barrales no la hubieran convencido de que era invencible, tan sólo para que la dejaran colgada de la brocha a la mera hora, tal vez no estaría la izquierda en esta situación.
Si la izquierda quiere evitarse esta crisis, lo único que podrá hacer será forzar a Mancera a seguir un estricto programa de izquierda y adoptar las propuestas de Martí Batres pero YA.
Vamos, Mancera tendrá que poner a Martí y a Noroña en cargos importantes en el GDF y hacer gura con ellos para demostrar que sí es de izquierda.
De lo contrario, el riesgo de que gane el PRI con Alejandra Barrales de candidata será real y la izquierda no tendrá manera de evitarlo.
Por eso mejor AMLO 2012.
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