De acuerdo con Milenio TV, lo que orignalmente se creyó que eran coches bombas tenían placas americanas.
Uno de los estados estaba estacionado atrás del Casino Magnific, a pocos metros de distancia de la casa de gobierno donde tiene su residencia el gobernador priista Egidio Torre Cantú.
Cerca del lugar de uno de los estallidos, sobre Calzada Tamata, se encontró una narcomanta.
Los estallidos ocurren a dos días de que un convoy de militares de Estados Unidos entraran a Matamoros, Tamaulipas, escoltados por el ejército mexicano, para una reunión en una base militar de la localidad.
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