El PRD, PT y Movimiento Ciudadano soltaron ayer otra bomba contra la derecha: después de las elecciones de 2012 fundarán un nuevo partido político que aglutine a todas las izquierdas. Llevará por nombre Partido Frente Amplio Democrático (PFAD).
El nombre se deriva del Frente Amplio Progresista (FAP) creado durante los plantes del Zócalo y Reforma para mantener unidos en bloque en el congreso a los tres partidos que conformaron la Coalición por el Bien de Todos, que postulara a Andrés Manuel López Obrador a la presidencia en 2006 por los partidos PRD, PT y Convergencia.
(De hecho, del FAP se deriva también el nombre de Movimiento Progresista, que es la propuesta de AMLO para el nombre de la coalición de izquierda que lo postulará para la presidencia en 2012.)
Partido Frente Amplio Democrático será creado por acuerdo de un consejo político que incluirá a los dirigentes nacionales de los tres partidos de izquierda, a AMLO, a Cuauhtémoc Cárdenas y a Marcelo Ebrard.
¿Quié podría ser el primer dirigente nacional del PFAD? Adivinaron: Marcelo Ebrard.
No podría ser AMLO puesto que la apuesta de la izquierda es a que AMLO gane las elecciones presidenciales. Ni podría ser Cuauhtémoc Cárdenas porque, vamos, su figura es más simbólica que activa.
Además, la creación del PFAD coincidiría perfectamente con el fin del sexenio de Ebrard como Jefe de Gobierno. Con razón estaba tan contento Marcelo Ebrard poco antes de que se diera a conocer que AMLO ganó las encuestas para la candidatura de izquierda.
Personalmente veo con buenos ojos que Marcelo Ebrard sea el primer dirigente nacional del PFAD. Eso lo mantendría vigente como figura de izquierda. Al término de su gestión como dirigente del PFAD puede ser diputado federal y seguir vigente en la vida política.
“¿Y los chuchos?” se preguntarán varios. Los chuchos se verían disminuídos en influencia ya que numericamente serían menos que el lopezobradorismo al unirse PRD, PT y MC. Tendrían entonces de dos sopas: o dejar de hacer cochinadas, o irse al PRI —que no dudo que será lo que pase en algunos casos.
Por lo demás, la fusión de las izquierdas para tener unidad en el país es una muy buena idea. Que de todos modos ya pasaba. Hay varios ex perredistas en el PT actualmente. Fusionarse garantiza que el voto de la izquierda no se divida y que se ganen elecciones que de otra manera se podrían perder.
No sólo eso; al fusionarse los partidos de izquierda se reduce el número total de partidos políticos y el PVEM y el PANAL quedan evidencia como lo que son: uno apéndice del PRI y el otro un mercenario al servicio del mejor postor.
Y claro, las opciones electorales entonces serían sólo dos: la derecha caduca, integrada por el PAN, el PRI y sus apéndices, y la izquierda.
Por eso mejor AMLO y Martí 2012.
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