Por principio de cuentas, damos por descontado que el ganador de la encuesta de la izquierda que se levantó el pasado fin de semana, será López Obrador. Como ya se ha señalado en este espacio, fuentes cercanas tanto al Peje como a Ebrard habrían deslizado la versión, además de los acuerdos a que habrían llegado ambos políticos para garantizar la unidad.
Bien, si AMLO es anunciado como el próximo candidato presidencial de la izquierda, el efecto en la elección michoacana del próximo domingo sería importante, porque le daría el impulso final a Silvano Aureoles y pone en riesgo el "triunfo", con todo y el aparato del estado volcado en su favor, de la hermana de Calderón. Fecal está determinado a imponer a su carnala en la gubernatura a como de lugar, sin importar lo que tenga que hacer para lograrlo; no sólo lo quiere, sino que además necesita desesperadamente hacerlo, si quiere conservar un "reducto" presupuestal y de poder para enfrentar lo que sabe viene para él una vez dejando la presidencia que se robó.
No sería descabellado suponer entonces que, ante lo inevitable del triunfo de AMLO en la encuesta, Calderón presione a los chuchos del PRD para retrasar lo más posible el anuncio, de preferencia hasta después del domingo, cuando el fraude y el aparato hayan logrado imponer a la "Cocoa". Los chuchos han demostrado ser muy funcionales a los intereses del calderonismo, y no dudarían en hacerle ese favorcito a cambio, seguramente, de una buena compensación.
Por cierto que, por si las moscas, el PRD chucho ya anunció que, aunque el acuerdo era elegir al candidato presidencial mediante el método de la encuesta, siempre no lo harán así, y prefieren hacerlo por elección de los delegados, es decir, por dedazo. ¿Pues no que muy democráticos? Pensaron que podrían manipular la encuesta como manipulan a su antojo las elecciones internas del partido, y ahora que se dan cuenta que no pudieron parar a AMLO, ya no quieren elegir candidato por ese método. ¿Miedito?
Por supuesto, siempre queda la duda si el PRD chucho e incluso Calderón y el "gobierno" federal no darán un madruguete, intentando "tomar por asalto" la encuesta, e imponer, haiga sido como haiga sido, a Ebrard como el candidato presidencial. ¿Podrán lograrlo?
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