El lunes 22 de febrero de 2012, Andrés Manuel López Obrador hizo berrinche y acusó a todo mundo de ser de "la mafia del poder."
En esa categoría puso a los tres gobernadores que él mismo apoyó en 2012; Miguel Ángel Mancera, Arturo Núñez y Graco Ramírez. Que porque le dieron la espalda a su movimiento.
Eso sí; como es su costumbre, López Obrador omitió mencionar que mucha gente le dijo que no apoyara a Graco Ramírez y a Arturo Núñez, pero lo hizo de todos modos. ¿Su excusa? "Ej que íbamos por la prejidencia y tenía que haber unidá."
En otras palabras "puej porque me convenía."
Pero ahora que no le quieren seguir el juego, entonces ya todos son "mafia del poder."
(AUNQUE en el caso de Mancera no supo ni cómo justificar el ataque, porque primero alegó que su problema con Mancera son las cámaras de fotomultas. Pero cuando le preguntó Reforma si eso lo vinculaba con la mafia del poder, dijo que "claro que sí. Tiene relaciones con Chong, tiene muchas relaciones con Peña Nieto." Nadamás que eso no tiene nada que ver con las fotomultas y las relaciones con Osorio y Peña las tuvo desde el principio y AMLO nunca se quejó. En otras palabras, AMLO ya no sabe ni qué decir para escupir veneno.)
Pero esa cantaleta ya nos la sabemos. La novedad no esa. Lo que llama la atención de lo que dijo en Tabasco el lunes 22 de febrero fue esto:
"Por lo que a mí me corresponde, ofrezco disculpas, porque en esta lucha, cuando menos se espera, hay traiciones por parte de gente ambiciosa que nadamás busca el cargo, cuando nosotros queremos que haya justicia y no los cargos."
O sea que AMLO está esperando más traiciones.
Nadamás que hay un detalle: Luego de las elecciones de 2015 los únicos que lo pueden traicionar son los propios militantes de Morena. Más específicamente, los 5 jefes delegacionales, 2 presidentes municipales, 40 diputados y 20 asambleístas que sí tienen hueso.
Lo cual quiere decir que ni en Morena creen en los planes de Andrés Manuel y el propio Andrés Manuel lo sabe.
Eso sí; Andrés cacarea que en tooodas las encuestas Morena y él son los favoritos para 2018.
Lo cual es una verdad a medias. Las encuestas lo dan como favorito a él A VECES, no siempre. Y lo ponen en no más de 25% de preferencia electoral, con lo cual fácilmente podría perder contra El Bronco o contra el PRI, ya que el margen de ventaja que tiene AMLO es realmente pequeño.
Supongo que este nuevo berrinche de Andrés Manuel fue porque estaba en Tabasco, y cree que haciendo berrinche Morena va a ganar la elección extraordinaria de algunas alcaldías. Pero como ya demostramos en esta columna, la división del voto que está causando Morena lo que logrará será que el PRI gane, el PRD quede en segundo lugar, y Morena en tercero. Si bien le va.
Lo irónico es que AMLO tacha de "mafia del poder" a quien se le pega la gana, pero en Tabasco aceptó en sus filas al ex candidato del PRI a la alcaldía de Centro, mismo a quien tachó de servir a la mafia del poder apenas el año pasado.
Ah qué fea es la incongruencia... y la desesperación...
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