El dirigente nacional del PRI, Manlio Fabio Beltrones, ya de plano se vio patético y desesperado luego de que su yerno, el senador del PVEM que obtuvo su pluri por ser yerno de Beltrones, Pablo Escudero, interpusiera ayer una denuncia frívola y sin mérito legal contra el titular de la Fepade, Santiago Nieto, en represalia por haber solicitado el arresto de el líder del PVEM, Arturo Escobar, por haber comprado votos con tarjetas de descuentos.
Según la denuncia que puso Escudero, Nieto violó la reserva de confidencialidad de la indagatoria contra Escobar por haber dicho Nieto que al desarrollar sus funciones como fiscal, consignaba a aquellas personas que se consideraba que han incurrido en una conducta delictiva.
Lo cual es obvio. No es posible pedir el arresto de nadie si no se considera que cometió una conducta delictiva.
Pero Escudero es tan buey que cree que con eso ya va a tirar a Nieto.
En el colmo del cinismo, Escudero declaró que "lo que estasmos aquí nosotros cuidando es el Estado de Derecho."
¡Pero si el PVEM violó el Estado de Derecho múltiples veces! Por eso los sancionaron con cientos de millones de pesos. Y por eso precisamente es que Escobar está siendo procesado por delitos electorales.
Nadamás que, como dijimos, Escudero es tan buey que luego se echó de cabeza solito. Dijo:
"Se ha buscado hacer un juicio sumario en contra del señor Escobar, y nos parece que ha contribuido a ello el señor fiscal."
Ya salió el peine entonces. El Estado de Derecho le vale madres a Escudero (léase al PRI en realidad). Lo que le molesta es que hayan puesto en evidencia que el dirigente del PVEM, partido en el que milita Escudero, es un delincuente.
Ahora bien, desde hace mucho se sabe que Escudero es un simple achichincle del PRI. Se vio el sexenio pasado cuando le hizo una "pregunta" al pelmazo de Sebastián Lerdo de Tejada para darle pie a que hiciera guerra sucia contra Andrés Manuel López Obrador y Marcelo Ebrard desde la tribuna de San Lázaro por el tema de los segundos pisos. Pero con tan malos resultados que el PT le calló la boca a Lerdo de Tejada y lo dejó en ridículo con datos y direcciones de internet en mano.
Esta vez Escudero también hace el ridículo y queda como achichincle y correveydile del PRI, poniendo al mismo tiempo a su suegro, Manlio Fabio Beltrones, en calidad de desesperado y hasta cobarde, al ser su yerno el que se ponga a hacerle guerra sucia a Santiago Niego para tratar de taparle el trasero a Arturo Escobar.
¿O qué Beltrones no tiene los tamaños para ir él a poner la denuncia si tanto le molesta al PRI?
Porque, OJO; El PRI no se ha deslindado de Escobar. Al revés: lo pretende defender a pesar de que Escobar cometió delitos electorales.
Priistas al fin y al cabo.
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