De acuerdo con Reforma, la Cruzada contra el hambre no atenderá a municipios con pobreza superior al 50%, como San Francisco Tlapancingo, Oaxaca, com 56.1 por ciento vive en pobreza extrema, y Zirándaro, Guerrero, 57.4 por ciento.
En cambio, el programa de Peña Nieto sí atenderá a municipios de alto nivel adquisitivo, donde la pobreza extrema es mucho menor, pero que tendrán elecciones este año.
Entre esos municipios se encuentran Aguascalientes, Puebla, Mexicali, Durango, Torreón, Saltillo, Oaxaca, Fresnillo, Cancún, Culiacán, Boca del Río, Coatzacoalcos, Veracruz, Reynosa, Matamoros y Chihuahua.
Tan sólo en Tijuana la pobreza extrema es de 3.5%, mientras que en Aguascalientes es de 2.3%.
Esto ha llevado a ver a la Cruzada contra el hambre como un programa meramente electorero que no atiende el verdadero problema de la pobreza en el país.
Tan sólo en Baja California, donde se llevará a cabo la cruzada contra el hambre en 3 de sus 5 municipios que representan el 85% de su población, este año habrá elección para renovar gubernatura, alcaldías y congreso local.
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