Tal y como se esperaba, el PRI dejó bastante claro que congelará la reforma debido a la transparencia sindical, convirtiendo a la reforma laboral en una derrota para Felipe Calderón y para Enrique Peña Nieto.
Sí; Manlio Fabio Beltrones, coordinador del PRI en San Lázaro, declaró que su partido quiere eliminar artículos de la transparencia sindical, y que se van a tomar todo el tiempo que sea necesario para "analizar" los cambios que le hizo el Senado.
En realidad eso es una manera muy mamerta de decir que la reforma laboral se va a la congeladora, ya que si el PRI sabe qué es lo que quiere eleminar, entonces no tienen mucho que analizarle.
El PRI no quiere la modificación que el Senado agregó al artículo 371 de la reforma laboral, en el cual se ordenan elecciones con voto secreto para elegir a los líderes sindicales. Tampoco quiere el 388 sobre la transparencia en los contratos colectivos.
Y vamos; el PRI ya había dicho que si le añadían la transparencia sindical, iban a congelar la reforma.
Si la reforma laboral se queda congelada significaría una derrota para Calderón porque no pudo pasar su nefasta reforma neoliberal que perjudica a los trabajadores.
Y también sería una derrota política para Enrique Peña Nieto porque quedará en evidencia que quiere proteger a toda costa a lo peor de la podredumbre del sindicalismo charro al oponerse el PRI a la transparencia sindical.
Quien mejor queda ante la opinión pública es la izquierda, ya que siempre votaron en contra de la reforma laboral, pero movieron bien las piezas en el tablero para aprobar la transparencia sindical y de esa manera obligar al PRI a congelar la reforma.
El PAN queda como el opresor explotador es, y el PRI como el defensor de caciques sindicales que es.
Aún así hay que estar atentos. La reforma laboral ya está prácticamente en la congeladora. Pero hay que ver qué pasa si por algún milagro la reforma laboral pasa en comisiones. Que lo dudo.
PD: La ruta de la reforma laboral es ahora la siguiente:
1. El PRI, que tiene la presidencia de la comisión del trabajo de San Lázaro, congela la reforma laboral. Es decir, no la va a poner a discusión ya que no hay ninguna obligación para hacerlo ni límite de tiempo.
2. Dos cosas pueden pasar:
A) La congelan y hasta ahí llegó la reforma laboral. Es decir, no habrá reforma laboral.
B) La congelan y la descongelan hasta después del primero de diciembre, cuando Felipe Calderón ya no esté en el poder y sea más fácil maicear a los panistas para que le quiten la transparencia sindical.
Si pasa la opción B, que lo dudo, el PRI le quita la transparencia sindical a la reforma y se regresa otra vez al Senado.
SUPONIENDO que también se maiceen a los senadores panistas, entonces se acepta la reforma laboral sin transparencia sindical y el PAN tiene un problema político enorme, ya que estaría al mismo nivel que el PRI y le pegaría igual políticamente en las elecciones de 2013, lo cual beneficiaría a la izquierda.
O bien...
SUPONIENDO que NO se deje maicear el PAN, el Senado rechaza los cambios de la cámara e diputados y la reforma se rechaza, lo cual quiere decir que no se podrá tocar el tema nuevamente hasta septiembre de 2013.
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